En A Vampyre Story nos encontraremos con escenarios a la antigua, totalmente dibujados a mano, y con un nivel de riqueza y detalle visual que a muchos recordará inevitablemente a la mencionada tercera entrega de la saga Monkey Island. Más allá del reclamo publicitario en alusión a aquel título de LucasArts que aparece en la caja del juego que nos ocupa, en Autumn Moon han querido homenajearlo siguiendo el mismo modelo de animación estilizado y detallista, siendo por tanto el renombrado juego de piratas e islas caribeñas la influencia más directa que se nos puede venir a la cabeza al embarcarnos en esta aventura de vampiros cargada de paisajes nocturnos, criaturas extrañas, y múltiples muestras de humor y parodia al mundo de la mitología vampírica.